Ha sido un fin de semana increíble chic@s.
Así es como me gustaría empezar hoy la entrada en mi blog.
Había nervios sobre como saldría todo, imagino que es normal en todas las facetas de la vida: antes de hacer un examen, antes de una competición, antes del primer día de trabajo o ante cualquier acto importante.
Pero la verdad es que la acogida ha sido magnífica, el tiempo nos ha respetado y todos y todas nos lo hemos pasado genial ¿o no? :p
Llevo un año viviendo por aquí y me siento muy a gusto, y por ello participar en cualquier acción en la zona es una maravilla.
Y es que el entorno llama a esto, a disfrutar de la montaña y la naturaleza en compañía.
El plan era sencillo desde el principio, dar a conocer nuestro entorno increíble, conocer gente que ama el deporte y el medio natural y por encima de todo disfrutar.
El sábado comenzamos calentando motores, suave cerca del pueblo.
Sol radiante, ya apuntaba a que iba a ser un gran día.
Una salida por los alrededores, unas “lecciones” de técnica de carrera (tan importante y tan odiada por todos los corremontes :p) tan necesaria para tod@s ya que nos hará ser mucho más eficientes y evitar lesiones e incluso caídas.
Después pudimos conocer las diferentes formas en las que se pueden realizar intervalos de calidad en el monte (hay tantas opciones como ideas tengamos en nuestra cabeza)
Los del #vpmteam ya saben a lo que me refiero jejeje
Subir, subir-bajar, subir y llano, bajar-subir, subir-bajar-llano, subir-llano-bajar….
Parece un trabalenguas jejejej
Probamos a hacer diferentes tipos de subidas. Tanto aquellos que más bien hacen senderismo como los que corren, pudieron aprender la técnica en subidas tanto andando como corriendo, también con bastones…
Las bajadas probando a talonear, probando a “volar” con los metatarsos.
Creo que nada más acabar esta parte ya hubo algun@ con agujetas :p
O alguno que ya que íbamos a bajar, para qué volver a subir jejejeje
Después hicimos una subida corta pero intensa para llegar una zona mirador preciosa.
Con esto el día no había hecho más que empezar ya que a la tarde (y tras una gran gran tormenta que salvamos), tuvimos una muy buena sesión de estiramientos.
A mí me encanta estirar, me encanta practicar yoga. Me hace sentir muy bien, me deja los músculos preparados para las siguientes sesiones de entrenamientos y las disfruto muchísimo.
Pude enseñar a tod@s mis estiramientos must, los que no deben faltar nunca en mis rutinas.
Hubo quien sufrió un poquillo con algún estiramiento (la falta de costumbre jejej), estoy segura de que se encontraran un poquito mejor después.
Y que lo introduzcan en sus días (aunque sólo fuera un ratito).
Después en la charla-coloquio sobre nutrición, todos aprendimos cómo realizar una correcta carga de hidratos, qué podemos llevarnos a nuestras salidas de trail y pudimos resolver dudas sobre nuestra alimentación o cómo mejorarla.
El domingo el día pintaba espectacular desde por la mañana, un día típico de junio con sol y calor.
La ruta fue espectacular, recorriendo el valle al lado del río que por suerte bajaba cargadito gracias a las últimas tormentas.
Las vistas eran increíbles y es que mayo y junio son mis meses preferidos. La montaña está en su apogeo, los animales pasean buscando comida a sus anchas, está precioso. No hace mucho calor y se puede disfrutar de estos valles que hasta hacía poco se vestían de nieve.
Me encanta la primavera.
Para acabar todos juntos en un magnífico día.
Ha sido muy bonito compartir estos días con tod@s vosotr@s.
Me ha encantado conoceros y poder llevaros por mi zona de entrenamientos, ha sido brutal.
Sólo espero que sigáis disfrutando de este deporte tanto como yo lo hago y espero veros pronto.
Nos vemos por las montañas.